Restaurante Pancipelao

Brutal!! No he comido un cocido mejor ni en mi casa y mi familia es de Madrid hasta mis tatarabuelos. La calidad es exquisita y servido como debe de ser con 4 vuelcos cada cual más rico si cabe. El personal maravilloso y cercano. Con detalles que te dejan asombrado por su cercanía. No me extraña que tenga el premio y más que debería tener! Tomás el dueño dando ejemplo como uno más y Ramon el mejor maitre que pueda haber. Enhorabuena!!! Volveremos seguro y además somos del barrio.

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Es la cuarta vez que voy y nunca defrauda. El cocido está buenísimo y es de los mejores que he probado en Madrid. Todo el personal es encantador y super atento, no tardan en servir la comida y la calidad-precio es perfecta.

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Pancipelao es un sitio de referencia para comer un buen cocido madrileño. No voy a explicar lo delicioso que está, voy a explicar otra delicia que tienen en su carta: el rabo de toro. Había comido cocido un par de días antes y decidí pedir el rabo de toro... de rechupete. Riquísimo. Soy una experta en el plato porque me encanta y estaba de 10! Así que no sólo de cocido vive Pancipelao!

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veníamos con el reclamo delejorncocido y la verdad que se ha quedado un poco a medias. muy generoso en cantidades pero un poco insípido y falto de fuerza en el sabor. en cualquier caso, agradable la comida

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Comimos genial. Ramón, el jefe de sala, súper atento, nos hizo recomendaciones, que tomarémos para la próxima, ya que en esta ocasión habíamos consultado la carta por la web e íbamos ya con una idea. Los camareros estupendos tambien y muy atentos. Estamos contentos después de las malas experiencias que tuvimos con sus vecinos de al lado, lugar al que hemos ido durante años y que estamos viendo cómo se va deteriorando poco a poco. Reedito: Gracias por sus palabras sr Diaz, estoy convencida que ante una opinión negativa es igual de educado y no nos envía a escribir microrrelatos como otros. Hoy hemos vuelto a comer y como las anteriores veces, pues qué decir, si no repetirme: genial. Salvo por el postre célebre, la filloa muy rica, pero el caramelo tiene vinagre....a los que no nos gusta demasiado el vinagre en dulce, deberían advertirlo En cuanto a la atención, como siempre Ramón genial y el camarero que lleva 49 años en hostelería, cosa que le honra porque se nota, también genial, a pesar de la cantidad de horas que se trabaja en este sector y con una sonrisa en la boca. Seguirémos yendo. Hemos descubierto un lugar cercano en muchos sentidos. Gracias.

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