Restaurante La Pitera

El restaurante está cerca de la Plaza Mayor de Salamanca y tiene opción de comida yo cena. Tiene una carta muy variada de todo tipo de platos. Son cantidades de comida bastante majas y la calidad-precio es una maravilla. La comida está muy buena y tanto el servicio como el ambiente fueron excelentes ✨

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La verdad es que la comida es impresionante.. muy buena toda la comida y muy económico todo. Bastante recomendable en calidad precio y más teniendo en cuenta la ubicación que es excepcional. Lo único así algo digámoslo extraño es su sistema de pedir.. si eres el amo en la tecnología no tendrás dudas y lo harás rápido (fue mi caso), pero por lo que veo la gente no está acostumbrada a este tipo de tecnologías de pedir con el móvil.. y no se porque, yo lo veo bastante fácil.

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No se puede reservar, se va allí y van sentando por orden de llegada cuando quedan mesas libres. Tienen QR para escanear y hacer el pedido, pero si estás en las mesas del piso subterráneo apenas hay cobertura y a nosotros nos dió problemas. Lo mejor es apuntar y hacer el pedido arriba. La comida está buena y de cantidad también, lo único que si hay mucha gente van bastante lentos... Nos tocó esperar media hora desde que pagamos hasta que tenían el pedido listo

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Está todo buenísimo, cantidades bien y el precio asequible. La comida tardó unos 10 minutos en salir así que el servicio de cocina también fantástico. La pena es que esté tan mal organizada la manera de hacer el pago. Muy novedoso el pedir por el móvil pero se formó una cola y estuvimos esperando 20-30 minutos

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Un local demasiado grande con personal insuficiente. Tardamos más de 40 minutos en poder pedir porque el método que utilizan, una carta virtual, no funciona. La comida estaba bien, pero sin más; cantidades generosas. El precio es asequible pero para un local que no tiene camareros, que te hace levantarte a ti a hacer los pedidos y traer los platos a la mesa, ni siquiera me pareció tan barato. En resumen: el trato despersonalizado, la larguísima espera por los fallos informáticos recurrentes, tener que subir y bajar escaleras para traer la comida a la mesa… no repetiría un restaurante estilo “100 montaditos ”, pero que no consigue funcionar de la misma manera.

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