L'avalanche

Pues después de una buena cena! Que no faltan los cócteles! Y creo que es mejor sitio de aquí! El personal muy amable. Sitio tranquilo, y agradable!

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Fuimos a tocar un jueves noche. El trato recibido por los camareros fue más que excelente, todo fueron facilidades a la hora de montar el escenario y durante el concierto ! Súper recomendable!

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Un sitio ideal para tomar una copa con un ambiente agradable. He de decir que Miguel me recomendó el 3r premio ganador en Gin-tonic (firma Cántabra!), y además de la copia muy bien servida el trato genial de él hace que de vez en cuando vuelva a visitar el lugar. Recomendable!

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Fui hace bastante y me decepcionó... Destacar que el trato por parte de los camareros fue muy bueno, atento y amable. Los cócteles eran muy vistosos para hacer postureo, pero en cuanto a sabor... No es que esten especialmente buenos. Lo único las chuches que traían para acompañar. Pedimos 2 que eran algo estraños: el de palomitas y el de petit suise. El de Palomitas no pudimos dar mas de dos tragos... Y el otro al principio ni nos gustó pero al final te acostumbrabas un poco. Pensamos porque nos arriesgamos bastante con los sabores asi que pedimos un normalito pero ni eso. Solo sbaia a hierbabuena... Les falta controlar las medidas para que haya un equilibrio de sabores bueno, porque si no se cargan el coctel. Además que son bastante caros 10-12€

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Se trata de un local de nivel enclavado en la c mayor de Puigcerda. Está muy bien decorado, estilo moderno y vintage al mismo tiempo. La sorpresa viene cuando el camarero se tira su tiempo explicándote la carta y aconsejandote, ya que es muy extensa y fácil de perderse. Tomamos la mejor piña colada que he probado nunca y un gin tonic simplemente sublime Quizás el mejor pub de Puigcerda

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Una decepción total... La verdad que los cócteles me llamaban la atención, tenían muy buena pinta y además muy bien decorados. El personal amable cuando entré y al atenderme pero... Los cócteles muy malos, el de palomitas un auténtico chasco, sin sabor a palomitas y con un sabor extraño. El de petit suise era algo más decente, pero tampoco estaba bueno del todo. Decidí pedir uno normal, pensando que no podía estar malo y para quitarme el sabor del de palomitas que me lo dejé casi entero. Pues mal también. Descubrí que el problema es que no controlan las cantidades de las bebidas e ingredientes. El que pedí solo sabía a vodka un montón y tenía un kilo de hierbabuena, ni se notaba el licor 43 que también tenía. Además, eso sí, los cócteles te los cobran... entre 10€ y 12€, si por lo menos tuvieran las cantidades que tocan... Una lástima... el local está muy bien decorado y podría ser una buena experiencia, pero no...

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