Café El Despertar

Buen concierto de Jazz

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Lo conocí buscando algún lugar con música en vivo... Y la banda de jazz que sonó esa noche me voló la cabeza, por la calidad de la banda, la calidad del equipo de sonido y la acústica propia del lugar. Las chicas que atienden muy atentas tmb. Se ganaron un nuevo cliente. Gracias por todo

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Lugar unico

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Sitio de ambiente vintage y auténtico con muchísimo encanto. Perfecto para tomar unas buenas copas a ritmo del jazz de cualquier concierto de viernes o sábado noche (la sala es muy pequeña y es recomendable reservar). Fijarse en la máquina registradora que siguen usando para los pagos en efectivo, una reliquia!

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Precioso bar, decoración, ambiente, cómodo, es como viajar en el tiempo para tomar unas o incluso café. Un gran “speakeasy” aunque deseando ver música en directo ahí ahora que han abierto de nuevo! Volveremos siempre que estemos por Lavapiés.

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Muy buen lugar, conversar, escuchar buena música, excelente atención..., ojalá abra pronto.

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El lugar tiene su encanto y su historia, pero la zona de música en vivo es un cuchitril que no reúne ninguna condición para escuchar jazz, ni por acústica ni por espacio. El sonido cuando fui era tan horrible y tan mal ajustado que me tuve que levantar a los 15 minutos y aun así la dueña insistió en cobrarnos las consumiciones y las dos entradas al “espectáculo”. 25€ por un vinazo, una caña doble y cuarto de hora de dolor de oídos. Bien por vosotros, pero creo que ha sido lo último que me vais a cobrar...

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Buena atención, lugar para conversar y tomar algo. Todo genial!!! También hacen conciertos de jazz

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Ambiente cálido y acogedor. Luz de gas ayudan ayudan a compartir momentos entrañables. Música de jazz aceptable aunque demasiado instrumental a veces.

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Bar con conciertos en directo, si bien la zona habilitada para los mismos es de espacio muy, pero que muy reducido. Ideal coger las mesas que están a la entrada de esa zona. Hay que negociar todo con el dueño, que yo creo que ya no está para estos trotes. No hay mucho control sobre quién paga y quién no para la actuación. Cuando estuvimos nosotros teníamos debajo a un grupo de tres chicas que nos dijeron que ellas no habían pagado y nadie les había dicho nada, aunque igual como se estaban apretando 3 copazos habían hecho la vista gorda. La zona no es muy allá pero merece la pena estar al tanto del menú musical.

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