Birdseye Rooftop Restaurant and Bar

El bar y los camareros eran fantásticos, al igual que la vista. La presentación de la comida y la bebida también estuvo a punto, desafortunadamente, la comida era sosa. Por lo general, no me gusta la comida demasiado salada e incluso encontré que el guacamole y la carne en las empanadas y los tacos carecían de sabor y sal. El vuelo de margarita y las bebidas estaban bien y exactamente como lo describió el cantinero, George. Pero eran caros, al igual que la comida. La calificación más alta se debe al personal y al ambiente.

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Birdseye es uno de los restaurantes y bares más nuevos de La Jolla y es la experiencia perfecta para cualquiera que busque cócteles divertidos, platos sabrosos y una hermosa vista al mar. Comenzamos con el ceviche de camarones (que estaba enorme y delicioso), el coctel de ginebra Bees Knees con lavanda y La Presion con tequila, pitahaya y menta. ¡Para la cena tuvimos el salmón King asado con espárragos y papas y la pasta de mariscos Linguini Allo Scoglio llena de mejillones y almejas! La comida, las bebidas y las vistas fueron de primera categoría. Estoy deseando volver y lo recomiendo encarecidamente!

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Vinimos aquí para el brunch en el cumpleaños de mi esposa. Realmente odio dejar una mala crítica ya que el personal fue muy agradable. La comida era decente. Definitivamente ni siquiera está cerca de la clase mundial como se describe. No había un solo artículo interesante en el menú, solo artículos de brunch muy estándar. Los precios eran absolutamente absurdos. Un vuelo de margarita cuesta $ 35 por 4 vasos increíblemente pequeños de jugo de fruta aguado. Mi esposa tenía un vuelo de mimosa que también costaba $ 35 por algunas de las peores mimosas que he tenido. Hemos estado en muchos restaurantes en el área y, en comparación con otros cercanos, el menú era aburrido, la comida era sosa y las bebidas eran realmente malas. Apenas había cócteles para elegir en el menú del brunch además de sus vuelos. Teníamos panqueques de plátano que eran tan duros que tuvimos que usar un cuchillo para tratar de cortarlos. También tuvimos una frittata de camarones, que en realidad era solo una tortilla básica. Dijo que tenía tocino, pero no había tocino. Fue casi $200 por 2 comidas y 2 cócteles. Estaría bien pagando eso si la comida me dejara boquiabierto y los cócteles fueran increíbles, pero estaba lejos de eso. Dukes al final de la calle tiene una mejor vista al mar y la comida y las bebidas son mucho, mucho mejores.

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¡Estábamos caminando por la calle y una familia salió diciendo qué vista tan fantástica y qué buena comida! Así que miramos el menú y decimos está bien, no hemos estado aquí antes, ¡vamos a dar un salto! Subimos las escaleras (para aquellos con problemas en las rodillas hay un ascensorascensor para sillas de ruedas. Lo tomamos cuando nos fuimos). En ese momento se nos permitía sentarnos en cualquier lugar. ¡Elegimos una mesa con vista a la cala! Tuve la tortilla de queso con tocino, papas de desayuno y un lado de salchichas y tostadas de trigo. Tomé el cóctel El Diablo con sal de lava negra y un cóctel verde menta servido en un vaso de piña con una piña deshidratada que vi servida a otros comensales. Mi esposo tomó el desayuno americano con tocino y tostadas de masa fermentada. Las papas del desayuno están ocupadas (pimientos y cebollas rojas y amarillas), sin embargo, ¡los cuadrados de papas estaban agradables y crujientes! ¡Puedes comer alrededor de los pimientos y las cebollas!

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Nuevo espacio en la azotea con magníficas vistas. Anexo al hotel Cormorant. Desde el nivel de la calle, tome las escaleras laterales a la derecha hasta la parte superior. Vinimos aquí el 4522 a las 7 p.m. y estaba ocupado debido a la puesta de sol. Pero alrededor de las 8, todos se fueron. No tenían anfitriona y el cantinero nos dijo que serían de 10 a 15 minutos. No hay lista de espera tampoco. Otra pareja vino detrás de nosotros y esperamos pacientemente para que nos sentaran. Pero luego vino una tercera pareja y simplemente arrebataron el asiento del bar frente a nosotros. Cuando eso sucedió, era evidente que sería por orden de llegada y que no íbamos a esperar para sentarnos. Vimos una mesa alta abierta y nos sentamos. LugarAmbiente (4 estrellas) Este espacio solo tiene capacidad para 49, por lo que es un poco pequeño. La vista no es gratuita, ya que se refleja en su comida y bebida. Un poco caro, pero oye, es La Jolla. Hermosa decoración con paredes suculentas. Empezó a hacer frío y deseé que tuvieran calentadores al aire libre. Eso es imprescindible para cenar al aire libre en San Diego. AlimentosBebidas (3 estrellas): Pedimos bebidas, pero estaban tan atrasados ​​y con poco personal que la comida salió primero. Luego descubrimos que las empanadas también salieron mal. Pedimos carne de res pero vino el maíz. Tan pronto como les notificamos el error, trajeron la carne como cortesía. -Empanadas de carne (3-$16) - Esto salió tibio y la masa

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