BarRío

Flipo con la dueña de este local! He entrado el Jueves Sto y, al ver el local casi vacío con la puerta entre cerrada, he preguntado si aún no cerraba, para poder tomar las copas tranquilamente. La dueña, que parece no querer captar la pregunta, me responde con son de mofa, que si no veo que está abierto, a lo que añado, para ser más explícita, si es que aún no van a cerrar (ya que dado que he entrado, ergo, esta abierto), pero... por cuánto tiempo? Aunque mucho feeling no había por su actitud, decido pedir la consumición, pagar y marcharnos cuanto antes (por suerte el barrio está lleno de bares guapos para continuar el tapeo). Lo que no me esperaba es que saliera tras de mí vociferando: Oye no me has pagado, que no has pagado... Tengo que decir que en principio me causó gracia, pues era absurdo, porque acababa de pagar y no podía tener tanta memoria de pez esa mujer!, siendo ella misma la que está atendiendo el bar y acababa de cobrarme, pero me quedé patidifusa al ver que no entraba en razón y, ya dentro del local, seguía repitiendo de forma muy contundente a toda voz frente a los clientes, que no le había pagado, a lo que respondí: Mira, te voy a volver a pagar, pero cuando mi banco me confirme los dos pagos, te voy a pedir hoja de reclamación y así fue. Cogí la hoja para rellenarla fuera (la hoja de reclamación está permitido rellenarla fuera o dentro del loca, es así por ley) pero nuevamente quedo perpleja cuando un individuo, que bebía cerveza en un rincón, empieza a vociferar que la hoja no la puedo sacar y no para de entrometerse e interpelarme balbuceando cosas con un acento latinoamericano muy arrogante, evidentemente era el típico ignorante de turno que va de lumbreras (seguro que no se sabe ni las leyes ecuatorianas o lo que sea, se va a saber las de aquí) Entonces, la dueña y él, muy compinchados ambos, comentan que mejor dejarme porque, claro, soy yo la que no me entero!!! Me troncho. Lo del individuo me da igual; no parecía tener muchas luces. La dueña era la especialísima, que en un garito donde solo hay bebiendo 3 personas y entran, le piden la consumición, se la pagan ipso facto y en breve se marchan, que salga montando la del pulpo porque dice que no le han pagado, no sé yo... pero me da que mucho no mola su actitud. Luego, cuando se demuestra que SÏ estaba todo pagado, pues ella se queda tan pancha, como si nada, total da iguaaaal el chiringuito sigue funcionando y si cuela cuela!! Aún no sé si es muy obtusa y no se entera o muy listilla. Las dos estrellas de la reseña las pongo por las empleadas, que son todas las camareras encantadoras y siempre me han atendido excelente, se merecen un sol.

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Genial,muy buen ambiente.

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Buena música, las chicas camareras excelente trato, te sientes como en tu lugar favorito para compartir con tus amigos

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Buen trato

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Un sitio muy agradable y con cosas ricas para picar! Muy buena atención

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Tostas y raciones muy ricas en una agradable terraza frente al parque.

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Siempre bien para picotear algo con toque casero.

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Bar regentado por gente joven y simpática con una terracita agradable. Toda la comida, mucha vegetariana, está muy rica. Ideal para tapear .

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Es un sitio cojonudo. Te atienden estupendo y la cerveza bien tirada. Se está a gusto tanto en la terraza como dentro. Si pasas cerca, no lo dudes:entra!

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Trato especial y un lugar maravilloso. La cerveza estaba genial y nos lo pasamos muy bien tanto mis compañeros como yo. No conozco especialmente bien la ciudad aún, pero de lo que llevo, me ha parecido un lugar muy bonito y particular.

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