BAR La Guarida de Judas

La Guarida nunca falla. Pero con el menú de San Valentín se ha superado con creces. Sabor fantástico y delicioso en todos sus platos. Restaurante muy muy recomendable.

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El mejor bar de la comarca con comidas y cenas espectaculares. Gran atención y simpatía de sus camarer@s y sobre todo del dueño. No os perdáis los vermú de los fines de semana, con su gran variedad de pinchos.

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Establecimiento de la localidad de Fuenterrebollo a escasos kilómetros de Cantalejo donde poder disfrutar de una comida con una gran calidad precio. Raciones con buena cantidad de comida con las cuales no te quedarás con hambre. Degustamos una ración de oreja a la plancha y unas mollejas, las cuales resultaron exquisitas. Seguimos la comida con un revuelto de morcilla y la acabamos con una tosta de bacalao ahumado y tomate, la cual termino de saciarnos. Dispone de una variada carta de postres, los cuales sorprenden al comensal por su sabor y su vistosidad. Sin duda una parada obligada.

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Anoche tuvimos el placer de cenar en La Guarida de Judas y disfrutar de las jornadas del marisco. La experiencia fue sencillamente excepcional. Desde el primer momento, el ambiente acogedor y el servicio atento nos hicieron sentir como en casa. Decidimos empezar con una mariscada, y no podríamos haber elegido mejor. Todo cocido a la perfección, el marisco estaba compuesto por carabineros, cigalas, gamba blanca, nécoras, centollo y buey. Cada pieza era una auténtica delicia, fresca y jugosa, con ese sabor a mar que tanto buscábamos. Era imposible decidir cuál nos gustó más, todos los elementos brillaron por su calidad y preparación impecable. Continuamos con unas mollejas de lechazo, tiernas y llenas de sabor, un plato que destacaba por su textura y ese toque tradicional tan bien logrado. Después, llegó a la mesa el solomillo de ternera, y solo podemos decir que fue el broche de oro perfecto para lo salado: carne de primera, en su punto exacto, acompañada de unas patatas que no hicieron más que elevar la experiencia. Para el postre, elegimos la tarta de queso, que resultó ser una auténtica maravilla. Suave, cremosa, con un equilibrio perfecto de sabores, fue el final ideal para una cena redonda. Todo esto lo acompañamos con dos vinos espectaculares: Quintaluna, de la bodega Ossian y Una Cepa, de la bodega Valduero. Ambos maridaron de forma sublime con cada plato, realzando los sabores y haciendo que la velada fuera aún más especial. En resumen, La Guari

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Tuve el placer de cenar en este sitio acompañado de amigos y nunca defrauda. Pedimos todo para compartir. La mariscada compuesta de: percebes, cigalas, gambas, centollo, buey y necoras. Era fresca y deliciosa, cada bocado era una explosión de sabor marino. Luego seguimos con las mollejas, tiernas y sabrosas, se deshacían en la boca, demostrando una excelente técnica culinaria. Pero lo que realmente se robó el espectáculo fueron los chuletones, jugosos y perfectamente cocinados a la perfección. Sin duda, una experiencia gastronómica que vale la pena repetir una y otra vez!!!

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